Pues no ha podido ser, no conseguimos el premio, pero hemos llegado a la final del premio Espiral, así que ya ganamos. Una palmadita en la espalda y a seguir trabajando, que es lo nuestro. Desde aquí envío un saludo a todo el equipo de Espiral, y en especial al jurado, que ha tenido que decidir entre más de 1800 blogs, una dura tarea.
Pronto volveran a llenarse los campos de girasoles, siempre a final de curso, la foto que ilustra la entrada la hice al volver del instituto un día de junio del año pasado.
Así es el blog, siempre regenerándose, un trabajo que no cesa. Y mañana a Aracena, para la ponencia sobre Arte y Literatura, en las V Jornadas de bibliotecas escolares, a las que he sido invitada para mostrar el trabajo de mis alumnos, se lo han ganado a pulso. Que nervios y que felicidad.